Sistema teológico de San Pablo


Un personaje como Agustín, que sigue ocupando un lugar mediador entre las dos grandes divisiones de la cristiandad, venerado por igual por ambos, y de igual influencia con ambos, es además una promesa bienvenida de la perspectiva elevadora de una futura reconciliación del catolicismo y el protestantismo en una unidad superior, conservando todas las verdades, perdiendo todos los errores, perdonando todos los pecados, olvidando todas las enemistades de ambos.

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Contradicción entre autoridad y libertad

Después de todo, la contradicción entre autoridad y libertad, lo objetivo y lo subjetivo, lo eclesiástico y lo personal, lo orgánico y lo individual, lo sacramental y lo experimental en la religión, no es absoluta, sino relativa y temporal, y surge no tanto de la naturaleza de las cosas, sino de las deficiencias del conocimiento y la piedad del hombre en este mundo. Estos elementos admiten una armonía última en el estado perfecto de la iglesia, que corresponde a la unión de las naturalezas divina y humana, que trasciende los límites del pensamiento finito y de la comprensión lógica, y que sin embargo se realiza completamente en la persona de Cristo.

Sistema teológico de San Pablo

De hecho, están unidos en el sistema teológico de San Pablo, quien tenía la más alta visión de la iglesia, como el místico "cuerpo de Cristo" y "el pilar y fundamento de la verdad", y que era al mismo tiempo el gran campeón de la libertad evangélica, la responsabilidad individual y la unión personal del creyente con su Salvador. Creemos y esperamos una santa iglesia católica apostólica, una comunión de santos, un rebaño, un pastor. Cuanto más las diferentes iglesias se hagan verdaderamente cristianas, más se acercan a Cristo y más trabajan por su reino que se eleva sobre todas ellas, más se acercarán unas a otras.

Cristo es la cabeza común

Porque Cristo es la cabeza común y el centro vital de todos los creyentes, y la armonía divina de todas las sectas y credos humanos discordantes. En Cristo, dice Pascal, uno de los más grandes y nobles discípulos de Agustín, en Cristo se resuelven todas las contradicciones.

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